Bajo estas líneas, mostramos las imágenes desoladoras y escalofriantes del antes y el después del paso de los incendios de Agosto de 2003, que arrasaron más de 10.000 hectáreas de un paraíso de pinos, alcornoques, castaños, quejigos, encinas y robles, entre otros árboles, arbustos y matorrales, tras su paso por Las Huertas de Cansa, Valencia de Alcántara y el resto de su hermosa campiña.

Tambien cabe destacar el esfuerzo de instituciones y personas para llevar a cabo una gran labor de reforestación en toda la zona. A pesar de todo, gracias a la capacidad de regeneración de la naturaleza, las instituciones y a Adenex (Asociación para la Defensa de la Naturaleza y los Recursos de Extremadura) con su "Programa Planta Bosques", se ha realizado una gran labor de limpieza de los restos del incendio y existe una reforestación permanente con ejemplares de la familia quercus como encinas, alcornoques, robles, madroños y otras especies de árboles autóctonos, sumándose a éstos los pinos pinaster que han aflorado por su propia iniciativa.